Pese a que con la crisis, muchos desempleados vieron en el autoempleo una salida para escapar del paro, lo cierto es que con la recuperación el incremento de la ocupación se está produciendo especialmente entre los asalariados y no en el trabajo por cuenta propia. De hecho, este año el número de autónomos ha descendido en más de la mitad de las comunidades autónomas.
España tiene todavía pocos emprendedores si nos comparamos con otros países como Estados Unidos con una importante cultura emprendedora. Según un estudio del Instituto de Estudios Económicos (IEE) a partir de datos de la OCDE, nuestro país ocupa el penúltimo lugar entre los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos en tasa de empresarios y empresarias incipientes, ya que sólo el 3% de los hombres y un 2,1% de las mujeres lo son, frente a una tasa media del 7,4% entre los varones y del 4,9% entre las mujeres para el periodo 2012-2016.
La organización considera que España debe seguir fomentando el emprendimiento entre aquellos grupos con una menor presencia en el mercado laboral como las mujeres, los jóvenes, las personas mayores, los desempleados y los inmigrantes.
Pero los expertos advierten del peligro de emprender por necesidad, sin asesoramiento y sin un plan de negocio determinado. «Llevamos años gastando millones de euros de las arcas públicas para meter gente en el mercado de trabajo, pero no hemos sido capaces de afianzar el emprendimiento y, por tanto, nos encontramos ante una burbuja del emprendimiento en toda regla», sostieneEduardo Abad, secretario general de la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (Upta).
La tarifa plana puesta en marcha por el Gobierno en 2013 ha animado a muchos trabajadores a emprender, al abaratar los costes de la Seguridad Social, pero esto ha provocado que algunos profesionales que no estaban suficientemente preparados para montar un negocio también lo intentaran.
«No todo el mundo sirve para emprender, ni está preparado para hacerlo», lamenta Abad. «La tarifa plana no puede ser un café para todos. Fomentar el emprendimiento desaforado genera muchas entradas (en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (Reta), pero también salidas y no sirve para asentar el sistema», añade.
Desde la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA) niegan que se haya creado una burbuja del emprendimiento y defienden la tarifa plana porque contribuye a ganar autónomos. «Si fuera fácil ser emprendedor y tener un negocio no habría tres millones de autónomos, seríamos seis o siete millones», argumenta su presidente, Lorenzo Amor. «Ser autónomo es un esfuerzo diario por sacar adelante un trabajo que ahora (con la aprobación de la Ley de Medidas Urgentes para el Trabajo Autónomo) se ha facilitado un poco eliminando trabas», que ayudarán a iniciar o mantener los negocios.
Pero lo cierto es que a falta de conocer los números de diciembre, este año el Reta cerrará con un crecimiento neto de apenas 15.000 activos. «Unas pírricas cifras», denuncian desde Upta, «que no cubren las necesidades del sistema».
En España hay 3.210.888 trabajadores por cuenta propia, pero el número de pensiones asciende ya a 1.953.246 con una pensión media de 641 euros. Y la cotización a la Seguridad Social se realiza sobre bases mínimas de 910 euros en el 80% de los casos. A la vista de estos datos, serían necesarios casi tres cotizantes al sistema para cubrir el pago de una pensión, algo que no está ocurriendo.
«Esto es lo verdaderamente urgente. Tenemos un problema tremendo de superviviencia del sistema», asegura Abad. «Aquí no se pueden seguir poniendo parches ni paños calientes, éste es un asunto que requiere de decisiones que garanticen la estabilidad y seguridad de nuestros sistema público de pensiones», añade. Para tratar de poner freno a esta «sangría», Upta ha propuesto en la subcomisión para la reforma del Reta que los autónomos coticen en función de sus ingresos.
Desde ATA, defienden la necesidad de continuar fomentando el emprendimiento porque es sinónimo de creación de empleo, y denuncian que en algunas comunidades autónomas no se está prestando «suficiente atención» a este colectivo, lo que explica a su juicio la pérdida de autónomos en algunas regiones.
Ahora bien, los expertos recomiendan, en cualquier caso, no emprender sin tener un plan de negocio y hacerlo en sectores con bajo riesgo financiero, sobre todo para aquellos que no tienen experiencia. «Lanzarse a la aventura es para las películas», sentencia Amor, «hay que hacerlo bien asesorado, con las ideas claras y una perspectiva de futuro».
Extracción y comentario propio sobre: EL MUNDO
Watching International Economy 
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