«El Gobierno aplica un plan netamente keynesiano»

-¿Está caro el dólar?

-El dólar libre se encuentra igual o por debajo de los niveles de fines de noviembre de 2015, una vez que se corrige por la inflación acumulada desde entonces. La inflación acumulada usando el índice de la ciudad de Buenos Aires y suponiendo un 5,5% para abril da 22,6%. El dólar ahorro valía, el 30 de noviembre, 9,69 pesos más un 20% de retención; costaba así $ 11,62 y actualizado por la inflación equivale a $ 14,25, o sea, apenas un 2,4% más bajo que el dólar actual libre, que se ubica en $ 14,60. La comparación con el dólar tarjeta es mucho peor, ya que la retención era de 35%, lo cual actualizado a hoy da $ 16,03, un nivel mayor en un 9,8% que el actual ($ 14,60). El contado con liqui (al que entraban las importaciones en el margen) estaba el 30 de noviembre en $ 14,45, prácticamente igual al dólar nominal de hoy, o sea que en términos reales es mucho más barato importar ahora. Concluyo que la Argentina es un país tanto o más caro que lo que era en noviembre de 2015.

-Entonces, ¿por qué está tan barato el dólar?

-Para contener la inflación sin bajar el déficit fiscal, la estrategia ha sido atar el dólar con dos piolines: deuda externa y Letras del Banco Central (Lebac). Estas últimas dan tasas de interés muy altas que no hacen atractiva la tenencia de dólares. El costo es que aumenta exponencialmente la deuda interna del Gobierno. La deuda externa, desde esta semana, hace realidad la amenaza de una «lluvia de dólares» que al aumentar la oferta haga bajar su precio. El costo es que aumenta, también exponencialmente, la deuda externa del Gobierno. El problema es que el dólar barato, unido a las inundaciones, el déficit fiscal y la caída del mercado brasileño, ha eliminado el superávit comercial desde 2015, o sea que por el momento hay pocas posibilidades de repago normal de la nueva deuda externa. Eso hace que las tasas sean altas, lo que agrava el problema. El mantenimiento del déficit fiscal, por otro lado, elimina la posibilidad de repago de las Lebac, lo que también dificulta al BCRA el refinanciar el stock de esas letras, que está colocado prácticamente a 40 días.

Fuente: La Nacion

Comentario: Creo que es un plan netamente keynesiano, donde los conceptos «ajuste fiscal y estructural» y «sector privado» prácticamente no se mencionan. Lo que más se escuchaba era que vendría una «lluvia de dólares para financiar obras públicas». No estoy de acuerdo con la estrategia elegida. Pero no me queda claro si el Gobierno quiere esto o es lo único que puede hacer, dada la falta de apoyo político en el Congreso para hacer los cambios mucho más profundos que se requieren para corregir nuestros graves desequilibrios.

 

Carrefour contratará a más de 6.700 personas para la campaña de verano

El 90% de los contratados integrarán las plantillas de los hipermercados, mientras que el resto lo harán en supermercados y otras filiales de la compañía.

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Los puestos estarán enfocados con la atención al cliente directa

Los empleos que se crearán para el verano estarán directamente relacionados con la atención al cliente, por lo que buscan trabajadores para la línea de cajas, reposición, puntos de venta de productos frescos (carnicería, charcutería, frutería, panadería y pescadería) y en venta asistida de secciones como tecnología o electrodomésticos, entre otros.

Aunque la empresa matiza que el perfil de los contratados suele ser variado, predominan los jóvenes demandantes de primer empleo y estudiantes. Carrefour contrató en 2016 a más de 300 universitarios y tiene prevista la llegada de otros tantos para este ejercicio, con el fin de que se incorporen a los mandos intermedios, gerentes o directores.

La empresa cuenta con diferentes acuerdos y convenios con universidades de todo el país. Además, incorporó a 60 jóvenes con perfiles profesionales relacionados con las nuevas tecnologías, para responder al proceso de digitalización en el que se encuentra inmersa. Carrefour cerró el año con una plantilla de 49.000 empleados en España.

Carrefour contrató a 300 universitarios en 2016 y tiene prevista la incoporación de otros tantos para este año

Comentario: Esto representa un aumento de contratos para los estudiantes. Dadas las cifras mencionadas podemos resaltar que la empresa está en una fase de auge y esta misma ayuda al empleo.

Fuente: La Vanguardia

Un keynesiano aupado por la crisis

El ministro Kicillof aumenta su influencia sobre la presidenta, mientras afronta el deterioro económico de Argentina

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En la misma semana en que el ministro de Economía argentino, Axel Kicillof, ha afrontado la segunda mayor devaluación del peso de 2014, una foto de él con unas militantes y admiradoras ha causado furor en Twitter bajo la etiqueta #Kicilove. De baja estatura, rostro juvenil, ojos claros y aspecto rebelde, con patillas de Elvis Presley y sin corbata, este economista autodefinido como keynesiano, de 42 años, de izquierda, arrogante pero pragmático, se afianza como uno de los más poderosos funcionarios del Gobierno de la peronista Cristina Fernández de Kirchner. A pesar de que afronta un estancamiento de la actividad y una inflación del 31%, según cifras oficiales, que pueden agravarse por la crisis de deuda del 30 de julio pasado y la consiguiente depreciación de la moneda.

Hijo de psicólogos, criado en el aristocrático barrio porteño de Recoleta, se formó en la educación pública: en el exigente Colegio Nacional de Buenos Aires y en la Universidad de Buenos Aires (UBA), donde consiguió el doctorado en Economía en una defensa de su tesis sobre Keynes aclamada por los estudiantes como si fuese una estrella de rock. Primero fue militante del colectivo estudiantil Tontos pero No Tanto (TNT), crítico del neoliberalismo de la Argentina de 1989 a 2001. Kicillof, casado, con dos hijos pequeños, había enfocado su carrera a la docencia en la UBA hasta que en 2009, tras seis años de kirchnerismo, se sumó, junto con otros de TNT, a la gestión de la recientemente reestatalizada Aerolíneas Argentinas. En 2010 inició su carrera de investigador, pero en 2011 debió pedir una excedencia en el mundo académico para asumir el cargo de viceministro.

En los últimos tiempos, Kicillof ha logrado prevalecer en dos debates internos en el Gobierno de Fernández sobre el otro funcionario que ha perdido peso en la gestión económica, el presidente del Banco Central, Juan Carlos Fábrega. Kicillof criticó el plan que tenían los bancos argentinos para comprar la deuda en manos de los fondos buitre y, de ese modo, evitar la crisis de deuda. La justicia de EE UU ha dispuesto que Argentina pague primero a estos acreedores que rechazaron la reestructuración de 2005 y 2010 antes de abonar a los que la aprobaron, pero Fernández y Kicillof se han resistido. Algunos banqueros habían reconocido que Fábrega estaba dispuesto a permitir que usaran las garantías de los depósitos de sus clientes para abonar a los buitres. El Banco Central lo ha negado.

Ante lo que las agencias de riesgo crediticio han calificado de impago del 30 de julio, rótulo que Argentina se niega a admitir, Kicillof ha impulsado un relajamiento monetario para contrarrestar una caída económica. Ya antes había hecho lo mismo con el gasto público. Ha logrado que el Banco Central bajara los tipos de interés, pese a la presunta resistencia de Fábrega, según la prensa de Buenos Aires. Algunos economistas han criticado la medida porque ha impulsado que el dólar subiera el 2,3% frente al peso en agosto. La tensión cambiaría también responde al desafío esta semana de Fernández y Kicillof a la justicia de EE UU al ofrecer a los acreedores de deuda reestructurada que puedan cobrar en Argentina lo que no han podido recibir en aquel país y Europa.

Pero no es la primera vez que Kicillof impulsa una devaluación. En enero, el dólar se apreció el 23% frente al peso, una de sus medidas ortodoxas para enmendar errores de los anteriores años de Fernández. Cuando llegó a ministro, en noviembre pasado, algunos analistas quisieron descalificarlo con el mote de marxista, pero este defensor de la intervención del Estado en el mercado comenzó su gestión con aquella devaluación seguida de una subida de tipos de interés y recortes de subvenciones al transporte, el agua potable y el gas. Además, corrigió las antes insólitas estadísticas de inflación y PIB, pactó la indemnización a Repsol por la expropiación del 51% de YPF que él mismo, como viceministro de Economía, había impulsado en 2012, y acordó el pago de la deuda con los países desarrollados del Club de París a los que Argentina llevaba sin abonar desde 2001, tanto tiempo como parte de los acreedores litigantes en Estados Unidos.

Este sendero de correcciones económicas, que había tenido un coste en términos de recesión y mayor inflación, necesitaba de una resolución favorable del juicio de los buitres en el Tribunal Supremo de EE UU para iniciar la recuperación en la segunda mitad de 2014. Pero ese tribunal se desentendió del caso y quedó firme la sentencia contra Argentina.

Ahora, Kicillof no solo domina el Ministerio de Economía sino que también axelistas son secretarios de Estado en otras dependencias, como Relaciones Económicas Internacionales y Energía. Los desafíos políticos y económicos que enfrenta se acrecientan cada vez más.

Fuente: El País

Comentario: Se tendría que buscar otro modelo para reflotar el sistema

 

¿Qué piensan los trabajadores de los robots?

 

La Escuela Keynesiana