Conversaciones de Bar

En mi primera aportación al blog, pretendo lanzar al aire una serie de ideas de un grupo de amigos, hechas en el mejor sitio posible…el Bar. Se debe tener en cuenta que los conocimientos económicos son relativamente bajos, ya que ninguno de nosotros somos expertos, de esta forma invito a los más entendidos a entrar en el debate.

guiness

La raíz de la discusión (como tantas tenemos), vino cuando mi amigo Roger se dio cuenta que no tenía dinero en metálico para pagar las cervezas que nos estábamos tomando (hasta ese momento ninguna novedad, ya que cada viernes era la misma historia…). En ese instante, su primera reflexión fue: “Si pudiera pagar en todos los sitios con tarjeta, independientemente de la cantidad, se me simplificaría mucho la vida…”.

Empezamos a hablar sobre la posibilidad de un mundo sin dinero físico, dónde lo único que existiera fueran transferencias de números de una cuenta a otra. En cierto modo, coincidimos que es un poco lo que se lleva hoy en día, y que es la dirección hacía donde vamos, ya que en la mayor parte de las transacciones que realizamos, no llegamos a ver físicamente el dinero.  Entonces surgió la primera pregunta: ¿qué hacemos con el dinero negro?¿podríamos aprovecharnos de su existencia?

En España, según datos de 2007 concentra prácticamente un tercio de los billetes de 500€ que hay en la Unión Europea, con un valor 84.578 millones de euros puestos en circulación en España (a través de los billetes emitidos por el Banco Central Europeo) nada menos que 56.318 millones (el 66% del total) corresponden a billetes de 500 euros. Ver siguiente enlace.

Dinero Negro

Supongamos que somos los ministros de economía del estado español, y que efectivamente queremos eliminar el dinero físico del país. Una propuesta sería aceptar todo el dinero de los contribuyentes, independientemente de su origen y blanquearlo o legalizarlo, ya que su valor en papel lo declararíamos nulo. En ese momento, el Estado pasaría a recaptar en impuestos muchísimo más dinero, ya que ciertos datos indican que la economía sumergida representa entre un 20% – 30% del PIB, cifra nada despreciable.

En tiempos de crisis cómo el actual, podría ser una medida de choque de consecuencias impredecibles, aunque de entrada parece que inyectaría mucha liquidez en los estados, y por lo tanto inversión y subvenciones. Podríamos salir de la crisis y España con tanta liquidez inyectada podría ser potencia mundial!!! Las cervezas empezaban a hacer mella…

En definitiva, parecía una buena idea, además creíamos tener el apoyo político de los ecologistas ya que salvaríamos un montón de árboles y bosques, con nuestra propuesta con aires medioambientales. La prostitución, drogas, ventas de armas y sectores que hasta ahora han trabajado al margen de la ley, podrían pasar a estar regulados económicamente pudiendo recaptar más y haciendo una sociedad mejor.

Aun así, buscándole los puntos negativos, a nivel social seria difícil que la gente mayor, o simplemente mucha gente, se acostumbrara a transacciones donde no intervenga un intercambio físico, quizá se perdería el concepto de valor de las cosas. Por otro lado, nacería otro tipo de dinero negro y trueque. Se volvería a dar mucho valor a los metales, así como a otro tipo de productos que volverían a estar al margen de Hacienda, incluso se podría llegar a la situación que el valor numérico que marcara tu capacidad para consumir, dejara de tener valor o dejara de ser la referencia para la gente, volviendo simplemente al pasado…

Como ya he dicho no somos expertos, y tan solo planteamos ideas y pensamientos en una buena conversación.

La moraleja es que después de 5 cervezas vuelves a la realidad, y cuando te acercas a la barra para pagar tienes que desembuchar dinero de tus cervezas y las de tu amigo en efectivo, y  te das cuenta que en ese momento el único que no está en crisis es el amo del bar…