Las expectativas de la ONU acerca de la economía mundial empeoraron este martes, ya que en las cifras que se publicaron en enero se había previsto un crecimiento del 3,0% tanto en 2019 como en 2020, como consecuencia de las tensiones comerciales y la incertidumbre política.
Un conjunto de factores internos y externos afecta a la mayoría de las economías desarrolladas. Después de crecer a un 3,0% durante 2018, la economía mundial moderaría el ritmo a un 2,7% este año.
«Naciones Unidas prevé para 2019 un crecimiento del 2,3 % en Estados Unidos, del 1,5 % en la Unión Europea, del 0,8 % en Japón o del 1,4 % en Rusia. Mientras, el conjunto de las economías en desarrollo progresaría un 4,1 %, con Latinoamérica y el Caribe aún a la cola, con un crecimiento de sólo el 1,1 %».
Además, la ONU ha destacado que la existencia de un deterioro en las condiciones financieras y los efectos del cambio climático podrían ser otros riesgos capaces de ralentizar la evolución.
«La organización advierte de que, de seguir aumentando los aranceles y las medidas de respuesta entre las grandes potencias, también pueden sufrir las economías menos desarrolladas, sobre todo aquellas cuyas exportaciones dependen en gran medida de esos países».
Elaboración propia a partir de La Vanguardia.